17 de octubre de 2017

Intervalos

No debí haber esperado tanto. Esa noche decidí volver, mis ánimos estaban por las nubes, unas que se ocultaban en el alba de un planeta lejano, y  digo algo muy claro... mis palabras son sencillas y  un poco empíricas, como el beso que nos dimos y que nunca recuperé.


No debí esperar, un intervalo marcó mi antes y ahora, ¿Dónde esta mi mundo? ¿Alguien debe consentir mis celos? No vi nada, mucho menos sus manos, espero algo que ya pasó y que ha cambiado. Intervalos... nacen; en las orillas del tiempo olvidado, en las corrientes del futuro mal planeado, pero sobre todo, en el corazón del egoísta.

¡Egoísta! No debiste marcharte, ¿Que pensabas? ¿Que te estaríamos esperando todo el tiempo? Pues no amigo, el tiempo no perdona y no tiene en cuenta el intervalo.  Te fuiste y eso es lo que cuenta y mientras no estabas, yo si lo estaba y en mis intervalos no existía un atrás...de hecho no existía yo, ¡no debí! ¿Dónde podré esperar yo? ¿Dónde podrás esperar tú? Cambiaré tus intervalos por mis mientras, y entre más mientras,  no mientas. No debiste.